Andando por la calle, al levantar la vista, doy con una imagen pavorosa: Una biblioteca repleta de estudiantes preparando sus parciales, finales, oposiciones, revalidas, monotonía... El aroma a desesperación se percibe hasta la acera.
Yo fui uno de ellos. Más bien lo intenté, porque soy un fiasco del sistema educativo. No logré plegarme a la disciplina de la enseñanza reglada. Mi falta de concentración y sobre todo, el desinterés por lo que me ofrecía, forzó mi deserción de los estudios tras no pocos disgustos. Antes que conocimientos, entendí, lo que trataban era inocularme actitudes (sumisión, resignación, paciencia...): La lobotomía imprescindible para anestesiar mi curiosidad y disponerme para una futura integración en el mercado laboral sin fricciones, sin chistar.
Bibliotecas de junio; estudiantes adocenados. Nunca sentí con tanta fuerza cómo la vida se me escapaba.
10 comments:
Acuña Matata!!!
Ese debería haber el cántico de aquellos años hacinados en la calle Quintana.
Era divertido encontrarte por allí de vez en cuando…, el pitillo en el banco de abajo, las bolsas de gusanitos de la panadería del mercado y por supuesto el ganado que estábamos allí metidos… jamás olvidaré al psicópata que estudiaba aeronáuticas. Dos bolis de cada color, perfectamente colocados en la mesa, el portaminas, la goma, el reloj, todo paralelo y perfectamente perpendicular.
Estudiar pasaba a un 2º plano y se habría un mundo nuevo en Acuña….jajajaja.
Con lo que yo verdaderamente flipo es con la capacidad que tenia de tirarme dia y dias en la biblioteca de la facultad estudiando y aprendendo, estudiando y aprendendo, estudiando y aprendendo, estudiando y aprendendo.
Asi. Y vaya, que funcionaba.
Por cierto señor Mario, me ha dicho un cierto señor que usted cumple años hoy?
Felicidades :D
Besos
Claudia
¿cumpleaños?¿cómo?¿quien?¿tú? coñe, me pillas desprevenido!!!... veamonos pronto!!!
felicidades mal estudiante!!!
Pues !felicidades!, ¿no?
Pat.
¡Gracias, salaos! Les debo unas cañas a todos.
Que conste que no me meto a comentar para que me toque una caña, aunque también.
Es que creo que de nuestro colectivo la que más puede saber de bibliotecas en Junio soy yo, y mira que este es probablemente sólo el segundo año en mi vida desde preescolar que no estoy ahí subrayando en una biblioteca pública. Lo malo es que tengo tanto curro que no noto la diferencia, pero dentro de un par de semanas todo terminará, por fin! Entonces estaría bien quedar y felicitarte como Dios manda.
Un beso
¡Trato hecho, Laura!
felicidades igualmente!
mm, la única vez que pasé un junio en bibliotecas creo que no aprendí gran cosa, pero acabé leyéndome la colección completa de Tintín...
un abrazo!
YO NUNCA PUDE ESTUDIAR EN LA BIBLIOTECA, NUNCA ENTENDI COMO LA GENTE PODIA, SI ES EL PEOR SITIO! LLENO DE GENTE, LLENO DE LIBROS PA ENTRETENERSE.... A LAS BIBLIOTECAS SE IBA A MNANGAR LIBROS OBSOLETOS DE PROGRAMACION BASIC
FELICIDADESSSSSS!!!!
Paco: Durante mis años lejanos de estudiante de química (sí, de química, qué pasa), lo que más leí mientras preparaba examenes fue textos de filosofía (que al final terminé cursando) y la revista Cosmopolitan. Por supuesto no pasé de primero.
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