Wednesday, December 29, 2010

NOBLEZA CADUCA

La esposa del duque de Couperin descorchó otra botella de su Gran Reserva y le sirvió una copa a su marido que, saltándose todo protocolo, se la echó al coleto igual que vino barato.

- Lo cierto es que la última añada que embotelló mi bisabuelo resultó excelente.

- Desde entonces no hemos gozado de una cosecha tan abundante.

- Da igual, tenemos reservas de sobra, sírveme otra copa, cariño- dijo el duque señalando los estantes de su bodega, donde comenzaban a abrirse huecos.

Mientras, los acreedores atravesaban campos de vides yermas en dirección a la mansión.

1 comment:

miss lisbon said...

Delicioso