Thursday, April 26, 2007

GOURMET

A su entierro acudieron destacados profesionales del arte culinario, pues Augusto era el más admirado de su gremio. Poseía un paladar tan fino y exquisito que murió de hambre.

4 comments:

Anonymous said...

A otro entierro acudieron muchas almas en pena , por la pena de su alma.

Anonymous said...

Je,je...



realmente crees que es posible desaprender ciertas cosas? Yo creo que lo máximo que se puede hacer a veces es vivir con ellas y/o aprender nuevas formas de vivirlas...

Yo a veces dudo mucho de esto...

Anonymous said...

Muchas veces, ser muy sabio o el mejor en algo, te convierte en un ser exigente e infeliz

Anonymous said...

Para eso estamos.... para tirar p'alante, jajajaj!

si es que si no... estamos listos!

saludos!